viernes, 1 de abril de 2005

Cartas desde Perú

He comenzado a escribirle a mi amiga del Sur. Todos los que viajan a los proyectos dicen que a los niños les encanta recibir nuestras cartas (es normal, a mi también me gusta recibir cartas). Aunque me resultó difícil saber que decirle, me alegro del esfuerzo, ahora me siento más cerca de ella, y su carta, en su brevedad, me parece más personal. Sólo tiene ocho años y vivimos en mundos muy lejanos. Es difícil establecer una comunicación así, pero lo importante no es lo que se dice sino la presencia y la amistad que se ofrece de uno al otro lado del océano por medio de un trozo de papel con unas palabras o unos dibujos.